La manufactura mexicana ante el T-MEC

Mar 30, 2020 Carlos Mortera Blogs 2

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Con este acuerdo comercial, se prevé un panorama de auge y expansión para el sector automotriz, en el que los fabricantes nacionales concreten nuevos proyectos, no sólo en EU, sino en Europa y Asia, sin dejar fuera el crecimiento de industrias como la de plásticos y manufacturas metalmecánicas, además del desarrollo de proveeduría de segundo nivel, en una plataforma de organización industrial.

 CIUDAD DE MÉXICO (30/03/2020). Una vez aprobado y puesto en marcha el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la maquinaria industrial mexicana podría retomar el auge que mantuvo durante años recientes.

Los últimos días del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) presentaron una serie de desafíos, especialmente en lo relativo al flujo de manufacturas entre México y Estados Unidos, sobre todo, en lo concerniente a aquellas relacionadas con la fabricación de componentes para el sector automotriz.

Aunque muchos de los aspectos revisados, como la imposición unilateral de aranceles en el acero, la exigencia de equidad salarial entre los tres países participantes en el acuerdo y el incremento de componentes producidos en la región del T-MEC, han generado muchas preocupaciones, también, por otro lado, significan oportunidades y retos que deben ser reconocidos.

Resulta más que claro que el TLCAN propició, en las últimas dos décadas, el desarrollo acelerado de la manufactura en México, y en especial la de automóviles, razón por la cual, el país es un eslabón obligado en la cadena de costos y en la búsqueda de eficiencia logística y operativa en la región.

Ahora, con la inminente entrada en vigor del T-MEC, este crecimiento podría mantenerse y consolidarse con la cristalización, a partir de este año, de las nuevas reglas para el flujo interregional de mercancías.

Como lo he mencionado ya, el mayor peso cae en la manufactura de automóviles y autopiezas, un sector para el cual se invirtieron días de discusión y delimitación, que es además medular para los tres países, tanto por su valor como por su significación emblemática, en lo que respecta a la potencial generación de empleos.

Un evento que es esperado, es que —basado en la competitividad en calidad y precios y la propia estabilidad del mercado automotriz—, se podría requerir, aunque de manera sigilosa en lo discursivo, que se mantenga o incluso incremente, la producción de autopartes en suelo azteca.

Intrínsecos en este escenario se encuentran sectores industriales de importante crecimiento en México, como son el de la producción de plásticos y de manufacturas metalmecánicas, además del desarrollo añadido de una plataforma de organización industrial dedicada, sobre todo, a la proveeduría de segundo nivel, a partir del concepto de clusterización (en cierta forma basada en la teoría porteriana) tanto del nicho automotriz como de otros relacionados.

Son varios los temas que deberán ser analizados con cautela en la antesala del arranque del tratado comercial.

Uno de ellos tiene que ver con la indicación de alcanzar hasta en 75% el volumen de contenido regional.

Acerca del autor:

Es director general de la Association for Manufacturing Technology (AMT).               

Leer el texto completo en la Revista Digital de Febrero-Abril 2020

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• Automotriz, Carlos Mortera, Manufactura, reglas de origen, T-MEC

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