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Mar 29, 2023 Silvia Ortiz Ruiz Blogs 0
Ante el boom que está teniendo el nearshoring en México y la tendencia mundial de cuidar el medioambiente, en la que las transnacionales de la industria en general, incluida la manufacturera, se siguen sumando a la meta de ser carbono neutrales para 2050 –e incluso algunas ya empezaron a condicionar a sus proveedores a ser 100% sustentables—, el uso de energías limpias no es una opción y México debe empezar a impulsarlas a fin de capitalizar al máximo este fenómeno global de relocalización de empresas.
CIUDAD DE MÉXICO (29/03/2023).-La dinámica de la redistribución geográfica industrial, de las energías limpias y del plan del gobierno de México con su oferta para hacer atractiva la inversión masiva con el uso por igual de energías fósiles y renovables, son temas de actualidad que están conectados entre sí por cuestiones de inversión extranjera, manufactura moderna y ambientales. Todo con un destino final: negocios.
Hablamos del nearshoring, esa tendencia de relocalizar geográficamente a las empresas, acercando la producción a los centros de consumo y ventas y que es y seguirá siendo un punto de conexión para expandir las energías renovables.
Se sabe que México es favorito en esta relocalización industrial manufacturera por poderosísimas razones:
Por su privilegiada ubicación de estar junto a Estados Unidos, flanqueado por los océanos Pacífico y Atlántico; por sus 14 tratados comerciales con 50 países, entre ellos el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC); porque el 50.3% de su población es menor a los 30 años… por su mano de obra especializada a costos competitivos, bajos costos de transporte y en menor tiempo de entrega… por ejemplo, llevar un contenedor de China a Estados Unidos costaba más de 16,000 dólares, mientras que de México a Estados Unidos, el principal centro de mercadeo de occidente, sólo 800 dólares…
El boom del nearshoring en México se refleja en que el porcentaje de nuevos metros cuadrados industriales ocupados en el país a raíz de este fenómeno, pasó de 12% en 2019 a 18% en 2020 y a 21% en 2021, alcanzando un 41% de crecimiento, de acuerdo con datos del Grupo Bursátil Mexicano.
Este explosivo asentamiento industrial llama a una reflexión: ¿cómo operará con la necesidad de usar energías limpias, que es otra tendencia mundial de negocio bajo el argumento de limpiar el ambiente históricamente deteriorado con el uso de combustibles fósiles?
La respuesta debía darla el gobierno, para no renunciar a esa inversión masiva externa, que de enero a septiembre del 2022, arrojó que el 61% del total de esas inversiones por nearshoring provinieron de Asia, concretamente el 40% de China, mientras que el 20% vino de Estados Unidos.
Esta reubicación manufacturera está concentrada en Nuevo León en 50%, seguido de Coahuila, con 11%; Yucatán con 8%, Chihuahua y Ciudad de México, con 7% cada uno; San Luis Potosí, con 6%; Guanajuato, con 3%; Baja California, con 2%; y con 1% cada uno, Aguascalientes, Durango, Estado de México, Jalisco y Querétaro.
Se avecina más inversión a regiones del centro y sur del país, mientras firmas de Alemania, Estados Unidos y China buscan reubicarse. Precisamente en enero pasado se anunció una inversión de 2,500 millones de dólares por parte de 23 empresas, según Data Métrica Aporta.
Convencido entonces de que el nearshoring dependerá, en suma, de la disposición de México de dirigirse hacia una economía circular y descarbonizada, y empeñado en atraer inversión contante y sonante, el gobierno federal tenía una oferta de energía fósil a la que no podía renunciar –porque de lo contrario significaría exterminar a Pemex—, en el entendido de que estos combustibles estarán vigentes al menos 30 años más en el mercado mundial.
Entonces puso el Plan Sonora como atractivo de transición energética y con la finalidad de llegar al año 2035 con una reducción del 35% de las emisiones de gases nocivos al ambiente. El plan oficial implica facilidades para invertir en energías limpias, en negociar la explotación del litio como factor detonante de la tendencia ambiental mundial para ser usado en la electromovilidad, principalmente.
Parques solares, es parte fundamental del plan gubernamental. Está la oferta de la planta solar de Puerto Peñasco, en Sonora, que podría generar 1,000 megawatts, que se suma a lograr la meta de la Iniciativa Climática de México para mitigar el deterioro ambiental, pues para 2030 México cumpliría su meta climática si genera 40 gigavatios.
Sonora es así, el polo de producción de energías renovables y electromovilidad del país, porque allí se fabricarán tanto baterías de litio como 5 gigavatios de energía como su aporte a la transición energética.
El tema energético ha sido complicado por su politización interna y llevada a terrenos internacionales, a partir de que México modificó su legislación eléctrica reduciendo la participación privada y extranjera en el sector.
Al parecer, el tema empieza a ser impulsado por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, quien recientemente ha contribuido en las negociaciones para la llegada de Tesla a Nuevo León. Asimismo, Empresarios indios, japoneses, estadounidenses y canadienses son atraídos para sumar inversiones en electromovilidad… El canciller Marcelo Ebrard y el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, han cabildeado estos propósitos, según información pública.
Por otro lado, la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, en enero pasado, convocó a los secretarios de Desarrollo Económico estatales a elaborar un plan de trabajo para los próximos dos años que contenga un diagnóstico de la vocación productiva de cada entidad y simplificar los trámites para que se estandaricen a nivel nacional. Este plan irá encaminado a aprovechar la relocalización de nuevas industrias.
Ya estamos finalizando marzo y esperamos pronto ver un resultado visible de este propósito…
Así concluyo el presente episodio de este espacio periodístico que se difunde todos los miércoles, por W Radio en el programa de Vero Méndez “La mejor información al amanecer”, de 5 a 6 de la mañana.
ESCUCHAR AQUÍ: (AUDIO)
Ante el boom que está teniendo el nearshoring en México y la tendencia mundial de cuidar el medioambiente, en la que las transnacionales de la industria en general, incluida la manufacturera, se siguen sumando a la meta de ser carbono neutrales para 2050 –e incluso algunas ya empezaron a condicionar a sus proveedores a ser 100% sustentables—, el uso de energías limpias no es una opción y México debe empezar a impulsarlas a fin de capitalizar al máximo este fenómeno global de relocalización de empresas.
Periodista y columnista con más de 15 años de experiencia. Ha trabajado en medios como CNN Expansión, Mundo Ejecutivo, Don Dinero con Alberto Aguilar, Televisa Radio, entre otros.
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La Industria Aeroespacial sigue despegando en estados como Guanajuato, nuestra especialista Silvia Ortiz de Vanguardia Industrial, nos explica la detonación de este sector en #NoticiasW con #VeroMéndez pic.twitter.com/itZ8boXKcU
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