Migrar las tapas a PET para “un envase icónico”, 100% reciclable: Husky Technologies

Abr 21, 2023 admin Más Industria, Plásticos 0

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La firma más grande a nivel global en sistemas de reciclado de PET  ya presentó las primeras tapas en PET, que lograrían “una botella totalmente reciclable desde arriba hasta abajo, sin etiquetas y 100% de vuelta al mercado”, pues las etiquetas –ya sean pegadas con adhesivos o termo encogibles—,  “de todos modos siguen siendo un alto contaminador de las líneas de reciclaje”, afirmó el gerente de Desarrollo de Negocios y Embajador Sustentable de Husky Technologies, Cristian Nuñez, en un webinar  sobre la conversión a PET y la economía circular, presentado por PMMI Media y Husky, como previo a Expo Pack 2023. El directivo resaltó que la única limitante para reciclar PET ya se logró en EU y habló sobre las tecnologías que maneja la empresa para trabajar con resina 100% reciclada o hacer productos inyectados directamente del PET. Además de destacar sus tecnologías de protección contra migraciones químicas, aseveró que “hoy Husky tiene la máquina más avanzada del mundo para reciclar PET”.

Blanca Soria

CIUDAD DE MÉXICO (21/04/2023).- Husky Technologies está desarrollando y ya presentó en la feria de Alemania “las primeras tapas en PET”, informó el gerente de Desarrollo de Negocios y Embajador Sustentable de Husky Technologies, Cristian Nuñez, quien resaltó que las tapas de los envases tradicionalmente se fabrican con polietileno de alta o baja densidad y polipropileno.

En el webinar “¿Cómo convertirse a PET exitosamente para cumplir con la nueva Ley General de Economía Circular de México?”, presentado por PMMI Media Group  y Husky Technologies, como un evento previo a Expo Pack 2023, que se efectuará del 13 al 15 de junio próximo en Expo Guadalajara, aseguró que  “estamos avanzando muy fuerte en lo que es migrar las tapas a PET para tener ahora sí, un empaque y envase icónico: sería una botella totalmente reciclable desde arriba hasta abajo, sin etiquetas y 100% de vuelta al mercado”.

Alrededor de este tema, comentó que para alcanzar un empaque o envase de PET sustentable la meta a alcanzar es “meter tanto contenido reciclado como sea posible. Nosotros les decimos ‘metan el 100% de reciclado’, porque eso es lo que ayuda más al planeta y eso es lo que les va a permitir (… a las empresas) tener mucho mayor impacto, no sólo con sus consumidores porque van a ser más sustentables, sino también con el medioambiente.  Esa es una parte de una economía (circular) y una regla sustentable en las empresas para llevar un mejor mercado”.

El envase de PET sustentable, continuó, debe ser “ligero y eficiente, tenemos que optimizar la tapa y el cuello se tiene que aligerar. Tiene que tener  un cuerpo resistente y una base funcional. Esto se hace diseñando bien la performa,  teniendo la distribución de plástico correcta en el soplado,  y  todo eso se optimiza para que no sea un empaque sobrecargado, sino que tenga lo que requiere  tener en gramaje para dar las resistencias  y optimizaciones necesarias”,  además de que “debe ser compatible en el reciclaje de las tapas”, aspecto que ya está legislado en Europa por lo que en ese continente “ya no se pueden retirar las tapas del envase” para evitar que éstas terminen contaminando en ríos o mares, pues el reciclaje de la tapa sola  “es muy  difícil”  y el tema de la tapa anclada al envase está avanzando también de manera fuerte en el ámbito legal en Estados Unidos “y creemos que en algún momento va a llegar a México”.

En Husky, subrayó, “ya tenemos las soluciones muy validadas para que las tapas se queden ancladas  y eso permite que se reciclen muy bien cuando  la botella llega con la tapa anclada a los  recicladores, ya los sistemas de separación que tienen en las líneas de reciclaje lo hacen automático. Separan muy bien el polipropileno o el polietileno de estas tapas del PET y se vuelve a reciclar, también, sin ningún problema”.

Label less o libre de etiquetas, “una tendencia fuerte”

 Asimismo,  señaló que  label less o libre de etiquetas es “algo muy disruptivo que estamos haciendo, el quitar las etiquetas”. Es una tendencia que cada vez cobra mayor fuerza debido a que las mangas o etiquetas de los envases, independientemente de la tecnología que usen –ya sean pegadas con adhesivos o termo encogibles—,  “de todos modos siguen siendo un alto contaminador de las líneas de reciclaje, entonces,  nosotros vemos que la tendencia es dejar de usar etiquetas, una tendencia fuerte”.

Destacó que aunque las etiquetas se pueden reciclar, “no es lo que la industria quiere” porque son “un problemón” para reciclarse y en contraparte, comentó que “es mucho menor el costo del grabado láser, la amortización del sistema de grabado a largo plazo, una vez que se recupera la inversión, el costo por parte, comparado contra la etiqueta, sí es mucho menor. Las etiquetas, es un tema, sobre todo las etiquetas de bloqueo que son las que tienen fondo negro son extremadamente caras. Hemos visto casos en donde la etiqueta de bloqueo es más costosa que el mismo envase, entonces, sí, el láser es más barato que una etiqueta”, aseguró.

Quitar las etiquetas “es una tecnología que tenemos nueva en Husky, se utiliza un aditivo que se graba láser (… y que) es totalmente compatible para reciclabilidad, se desvolatiliza a la hora del reciclaje sin ningún problema. Entonces, ¿qué hacemos? Se pone este aditivo en la performa, al soplarse en la botella se mantiene y luego se graba con un láser toda la información. Ahorita lo estamos haciendo en monocolor, pero estamos  avanzando ya, para que sean distintos colores. Eso les permite ya eliminar  el mayor ‘dolor de cabeza’ de la industria  de reciclaje, que son las etiquetas”, sobre todo, acotó, las de PVC “son el mayor ‘dolor de cabeza’. Es lo que todo mundo quiere evitar y es donde la tecnología de reciclaje está enfocada  para eliminar esos contaminantes”, dijo.

Las máquinas Husky, comentó, han tenido “muy buena aceptación en esta industria, con esta tecnología”, pues además está el boosting, con el que “se puede poner en el molde soplado la información y se puede soplar ya la información dentro de la botella”, y acotó: “por ahí hay unas botellas de agua que pueden ver en algunos establecimientos de café” de los que varios de ellos “ya tienen estas botellas de agua sin etiqueta”.

El PET, más barato que el laminado multicapa

 Sobre la conveniencia económica del laminado multicapa, luego de puntualizar que “se tiene que analizar la aplicación, depende mucho de cuáles son las berreras que tenga ese laminado multicapa”,   Nuñez especificó que “en casi todos los casos, hay un ahorro. No nos hemos encontrado hoy en día con una aplicación que quiera migrar de laminado a PET que sea más costoso el PET que el laminado. Siempre es más económico el PET”.

Al respecto, comentó que a los clientes de Husky “nosotros les ayudamos  a hacer el estudio económico. Les hacemos todo el estudio de costo por parte, inclusive de retornos de inversión, del balance y recuperación de la inversión y demás”.

De pouch a PET

La migración de pouch a PET en productos alimenticios listos para consumir es otra de las tendencias sobre las cuales, dijo el directivo, tienen innumerables peticiones. “Es nuestro principal trabajo ahorita. Tenemos una cantidad enorme de solicitudes de migración. Ya hemos migrado exitosamente  algunos materiales a PET. En Estados Unidos se han migrado, inclusive,  unos dulces muy famosos que los vemos todo el tiempo en la industria de alimentos, ese fue uno de nuestros principales casos de éxito. Se han migrado exitosamente a tarros de PET o envases de PET dedicados, que se pueden hacer sin ningún problema. Se pueden hacer envases a medida (…) sin problemas”.

Retorta o autoclave, la única limitante para reciclar PET, ya se logró en EU

 En el webinar dirigido a quienes actualmente están utilizando empaques y envases de un solo uso, laminados y con estructuras complejas de ciclo de vida corto o no reciclables, el especialista en conversión a PET circular y retornos de inversión destacó las décadas de experiencia de Husky Technologies –empresa en la que dijo, son “expertos en el rubro”—  e hizo hincapié ante los empresarios que presenciaron  el evento, que esta firma los puede  “ayudar a migrar todos sus productos”, aunque enfatizó que la única limitante del PET para reciclarse “es que no resiste un proceso de temperatura que se llama retorta”.

La retorta, también llamada autoclave,  “son procesos que el PET no resiste”, aunque refirió que “hay unas patentes ya en Estados Unidos de uno de nuestros clientes que lo  lograron hacer con una cristalización avanzada, lograron hacer que resista retorta, autoclave, pasteurización flash y entonces, ya no hay ningún problema, pero sin embargo, está limitado ahorita a esta patente de este cliente, pero sabemos que en los  siguientes años se va a ver más en el mercado. Una vez que eso llegue a todo el mercado, pues ya no tendría ninguna limitante el PET”.

Sistema High PET, con resina 100% reciclada 

Explicó que “lo que es llenado en caliente, llenado en ambiente, llenado en frio, aséptico, farmacéutico, (s procesa) sin ningún problema”, al tiempo que refirió que la firma para la que colabora cuenta con “un sistema High PET, que son nuestras máquinas que hacen performa para soplarse en envases. Es un sistema que puede utilizar 100% resina reciclada, eso es muy complicado en la industria. Las máquinas que hacen inyección de PET es muy complejo que puedan recibir material reciclado, que puedan tener una consistencia pieza tras pieza”.

Al respecto, resaltó: “Nosotros ya lo tenemos y la forma  como le hicimos es que todo el sistema ‘se habla’ entre sí. El secador ‘se habla’ con la máquina; la máquina, con el robot; el robot, con enfriamiento, con el posicionamiento performa; todo. Se ‘hablan’ y homologan. Dicen ‘oye, bajó la presión de inyección’, ‘hay un problema de humedad’,  y todo se autoajusta, se conecta con nosotros, nuestros sistemas son monitoreados y vamos viendo y analizando en vivo. Por eso es que podemos meter 100% de PET sin que sacrifiquen la calidad”.

High Electric PET: el PET, directo a productos inyectados

 Por otro lado, especificó que del PET también se pueden hacer productos inyectados directamente. “Tenemos una máquina que se llama High Electric PET que está hecha para inyectar paredes desde delgadas hasta gruesas. Podemos hacer inyección directa de contenedores rígidos y mover muchísimas piezas que estaban en plásticos de ingeniería o plásticos como polietilenos, polipropilenos y que se están migrando a PET”.

De hecho, “la primer máquina que vendimos de estas máquinas se vendió aquí en México, en Celaya, y el cliente está migrando de una aplicación de polipropileno a PET exitosamente, con un ahorro dramático”, ejemplificó.

Un PET mal reciclado, “difícil de inyectar apropiadamente”

 Asimismo, ilustró que “un PET mal reciclado es difícil que se pueda inyectar  apropiadamente consistentemente ¿por qué?  Porque tiene (…) contaminantes sólidos”, además de “la distribución de viscosidad intrínseca, que es su peso molecular. Si no está bien la viscosidad intrínseca en el PET y no  se logra en los reactores darla, es muy complicado que se pueda hacer una inyección correcta”.

De igual forma abordó otros aspectos del proceso: “Tenemos también las degradaciones por color (…) o por sólidos que se  quedan atrapados y revientan la botella, entonces, lo primero que hacemos nosotros en Husky es analizar la resina que ustedes van a usar. Nos mandan la resina reciclada, una muestra. Nosotros hacemos todo el laboratorio y decimos, ‘sí, perfecto, está aprobada, o no’. Y si no está aprobada les decimos cómo le tienen  que hacer o ayudarle a su fabricante de resina a lograrlo y cuando ya está aprobada,  darles el sello de garantía de que ya se puede utilizar en el sistema Husky y entonces, adelante, ya pueden arrancar y empezar a producir. La máquina va a hacer su trabajo, va a empezar a analizar condiciones dentro de la inyección para identificar si tiene bien hecha la resina o no y si tenemos problemas”.

Al hablar de otras aplicaciones con las que cuenta la firma, mencionó el “programa de monitoreo Advantage Elite, es un programa (en el que) no solamente analizamos en tiempo real sus máquinas, sino que estamos mucho más allá de un servicio post venta. Nosotros estamos prácticamente mano a mano durante tres, cinco años para que se despegue correctamente todo en su aplicación y es el sistema más avanzado que existe en la industria. Tenemos todo de la mano para ayudarles a llevarlo y que sea exitoso”, ofreció para hablar después de los aditivos que se utilizan en el PET para aplicar propiedades de barrera en los envases.

Cuatro propiedades de barrera en el envase

Luego de especificar que “son cuatro barreras las que tenemos identificadas: lo que es el oxígeno, la salida de CO2, la luz y algún termocromático o de aplicación láser”, el especialista en temas de reciclaje de PET, explicó: “Principalmente cuando queremos bloquear la luz, (…) se pone un colorante negro u opaco en medio y de esa manera bloqueamos la luz. Cuando queremos bloquear oxigeno ponemos, lo que le llamamos nosotros  el oxygen scavenger,  es una enzima que va comiéndose el oxígeno, lo va atrapando. Eso se pone en la capa de en medio, encapsulado, súper detallado en lugar de ponerlo en toda la performa, lo encapsulamos en la capa de en medio, muy fino, y le damos una vida de anaquel mayor en el caso (… por ejemplo de productos)  como jugo y cátsup, que requieren bloqueado de oxígeno, como la cerveza, esas enzimas lo que hacen es: van comiéndose, atrapando el oxígeno, no dejan que entre (al envase),  al mismo tiempo, también podemos poner  barreras que impidan que el CO2 salga y también podemos  hacer bloqueos  semi traslúcidos de luz, con el color ámbar. Podemos también poner barreras adicionales para evitar que la carbonatación se escape en los envases pequeños, aprobadas también por APR”, la Association of Plastic Recyclers.

Bloqueando migraciones químicas del envase a los alimentos

Algunos de los aditivos para aplicar propiedades de barrera en los envases emplean nano materiales y “el riesgo sí está” de que los nano materiales migren a los alimentos, afirmó Nuñez, quien resaltó al respecto: “Nosotros siempre sugerimos que se usen aditivos aprobados por la FDA, que es la  Agencia Federal de Alimentos en Estados Unidos. Entonces, mientras esté aprobado por la FDA —la FDA siempre expide una Carta de No Objeción donde dice a qué porcentaje de dosificación se puede utilizar para que sea grado alimenticio—, mientras sigamos  con esa regla no hay ningún problema”.

No obstante, enfatizó que  “en el caso de Husky tenemos un tema todavía mayor de protección porque como encapsulamos la barrera en medio, ahí tenemos un ‘sandwich’ que está bloqueando migraciones químicas y está aprobado por FDA. La FDA nos permite tener un ‘sandwich’  (…) de micras, que impidan la migración química, sin embargo, nosotros siempre utilizamos los aditivos FDA”.

En cuanto a estudios que señalan que el PET deja filtrar sustancias tóxicas o forever chemical a los alimentos y que afectan el proceso de reciclaje, hizo hincapié en que “cuando un PET está mal reciclado y no está certificado en grado alimenticio, tenemos posibles migraciones químicas. Eso es cierto, pero eso es cierto en todos los materiales, si el polipropileno, el polietileno está mal reciclado, es el mismo tema. Si el aluminio está mal reciclado, es el mismo tema. Si una botella de vidrio reutilizable está mal limpiada o no se recicla bien, es el mismo tema. Entonces, aquí lo importante es que el producto pase por una línea de reciclaje aprobada para grado alimenticio. Que esté certificada. Porque si no está certificada no tenemos la confiabilidad de que (no) vaya a haber migración química”.

En este sentido, refirió: “Siempre se hace el análisis de laboratorio. Se toman muestras de cada (…) PET que se produce de reciclado (…) y se analiza en el laboratorio. Se analizan químicos, solvencias volátiles,  todos los estudios específicos que pide un laboratorio FDA para poder garantizar que va grado alimenticio. Entonces se miden sólidos impregnados, volátiles complejos, acetaldehídos, toluenos, bencenos, para evitar precisamente migraciones químicas por tóxicos que puedan volatilizar o que puedan migrar  a través de las paredes del PET” y aseveró: “mientras venga  bien reciclado de nuevo, no va a tener ningún problema. Para todos los materiales es el mismo riesgo”.

Al referirse al PETG el directivo indicó que es un “PET con una molécula modificada de glicol, (que) tiene una aplicación distinta porque sus propiedades térmicas son distintas a la del PET normal” y resaltó que “generalmente el PETG no es aceptado en la industria de reciclaje de PET, (debido a que) es un contaminante porque al tener una grado de fundición –temperatura de fundición— distinta a la del PET, termina contaminando las líneas de reciclaje. Entonces, el PETG es un material que se tiene que reciclar independiente al PET y no mezclarlo”.

Explicó que las líneas de escrutinio óptico del proceso de reciclaje separan el PETG del PET para que el primero “no contamine los reactores y toda la línea”.

Prueba organoléptica del material reciclado

Acerca de si la firma realiza pruebas organolépticas al material reciclado,  Nuñez  compartió: “Nosotros como tal en Husky hacemos un estudio  cuando ustedes (los clientes)  nos piden que hagamos una revisión, una certificación de un PET reciclado,  sí lo hacemos  en laboratorio y analizamos. Sin embargo, eso le corresponde  al productor del empaque o el envase”, por lo que si la empresa tiene una aplicación de grado alimenticio “debe de tener un laboratorio que certifique que lo que están comprando en el material tiene grado alimenticio.”

No obstante, acotó: “Generalmente el PET ya tiene una Carta de No Objeción. Las empresas recicladoras  de PET reciben una Carta de No Objeción de la FDA que dice ‘este material que pase por estas líneas de reciclaje es grado alimenticio’ y expide un certificado; y de esa manera, ya están con los certificados de calidad y las pruebas que le hacen al PET para que garantice que sigan con ese grado”.

Por otro lado, detalló que el grosor de pared del envase reciclado no tiene ninguna variación. “El espesor de pared no cambia, entre virgen y reciclado. En algunos casos, si se pretende utilizar un distinto material con distintas propiedades al virgen, se pudiera modificar el espesor de pared, pero no; es transparente: Si ustedes hoy en día utilizan una botella con una performa de dos milímetros de espesor y la quieren migrar a rPET (PET reciclado)  y el PET reciclado tiene las mismas propiedades mecánicas por viscosidad intrínseca que el virgen, es estándar, no se tiene que engrosar para recibir PET reciclado”.

Refirió sobre “algunos casos en los que se engrosa la pared para meter reciclado malo. Cuando tienes un PET mal reciclado, entre más gruesa sea la pared más fácil se encapsulan los puntos negros, que son los que hacen que reviente la botella, principalmente en los (materiales) infundibles, puedes utilizar un PET más malo, pero eso no lo recomendamos nosotros. Recomendamos que utilicen un PET grado A, que sea FDA, que se pueda utilizar sin modificar los espesores de pared”.

De Husky, la máquina más avanzada del mundo

 Al explicar las ventajas que ofrece la firma sobre sus competidores,  el especialista hizo énfasis: “Hoy Husky tiene la máquina más avanzada del mundo para reciclar PET y lo que la hace especial es que prácticamente, homologamos toda la máquina. Pusimos especiales para separar, para filtrar, para separar, inclusive aunque el PET tenga grado alimenticio, nosotros tenemos doble trampa magnética, tenemos mayas de limpieza ultra finas, tenemos sistemas de homologación de flujo laminar para que sea una inyección conforme, adecuada, tenemos sistema de balanceo en toda la distribución del plástico en el molde para tener los puntos de inyección correctos, tenemos sistemas valvulados donde la inyección es precisa. Desde el secador hasta la performa, la inspección final está homologada a través de un sistema que (…) se va ‘hablando’ entre sí”.

Explicó que “todo el sistema tiene adicional un software que se llama Plus Estability  Package en donde automáticamente se ajusta. Se va  ajustando dependiendo de la variación de la resina, que eso es lo más crítico. Si (… se) tiene una resina, (de la que) compran 20 toneladas de PET reciclado, hoy, nada garantiza que el saco uno es igual al saco cinco. Nada. Uno puede tener  una  variación de ib de .1, de .02,  que es la viscosidad intrínseca. Otro puede tener más humedad, otro puede tener la coordenada de color distinta, en la L o en la A, los sólidos impregnados… entonces,  esas  micro variaciones que son dramáticas para controlar la inyección, simplemente en el secado, en homologar el secado y la inyección, los equipos es lo que hacen. Se auto alinean, se auto hablan y homologan lo mejor posible para ajustar esas variaciones”.

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• Cristian Nuñez, Expopack 2023, Expopack Guadalajara, Husky Technologies, Ley General de Economía Circular de México, Mundo PMMI, pet, reciclado

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