La tecnología en apoyo de la inclusión social de las personas

Jul 01, 2019 admin Automotriz, Más Industria 2

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Sandvik Coromant México y la Fundación Markoptic se alían para donar prótesis mecánicas a personas con discapacidad.

Por: Guadalupe Cadena

QUERÉTARO/Querétaro (01/07/2019).- Los jóvenes Ángeles Lomelí y Diego Encinas ganaron independencia y seguridad en sí mismos tras recibir una prótesis mecánica, que les permite compensar la falta de un brazo para realizar sus labores diarias. Pero lo que también es relevante es que estos dispositivos  fueron hechos en el país, con la creatividad de talento mexicano.

La Fundación Markoptic es la institución que está detrás de esta labor de beneficio social. Sin embargo, para cumplir su propósito de ayudar a más personas ―niños y adultos― requiere del apoyo del sector privado y una de esas empresas participantes es Sandvik Coromant México.

El sábado pasado, Sandivk ―fabricante sueco de herramientas y soluciones para corte y mecanizado― organizó la carrera Plogging Race en el estado de Querétaro.

La intención fue doble: por un lado promover la cultura del reciclaje de la basura y del ejercicio, y por otro fortalecer su alianza c zon la Fundación Markoptic en aras de que los clientes de la empresa ―de las industrias automotriz y aeronáutica, principalmente― conozcan este esfuerzo a favor de personas con discapacidad.

En la carrera Plogging ―que consiste en salir a correr o trotar y al paso recoger basura que se encuentra en el camino― participaron los trabajadores de Sandvik Coromant México y sus familiares, encabezados por Ester Codina, directora general de esta compañía, quien sumó también a esta labor de responsabilidad social a sus dos hijos, así como integrantes de la asociación PloggingMx, pero también representantes y algunos de los beneficiarios del programa de prótesis de la Fundación Markoptic.

Con la camiseta “bien puesta” ―una playera gris con el logo de la compañía―, zapatos tenis rojos y gorra para cubrirse del sol, Ester Codina, informó que esta es la primera vez que la empresa realiza una carrera de este tipo, hecho que describió como una experiencia inolvidable.

He venido con mis hijos, para que vean la necesidad de reciclar, de ser socialmente responsables como individuos y que nosotros como empresa también lo entendamos,

dijo la ejecutiva.

Unos a caminata y otros trotando, pero en total los participantes de la carrera transitaron bajo el sol por un circuito de 1.23 kilómetros. Costales, sobres para las ‘colillas’ de cigarro y guantes fue el equipo de apoyo para los voluntarios, quienes en total recogieron 73 kilos de basura. Por este resultado, la asociación PloggingMx ―quien retomó esta iniciativa de Suecia donde surgió hace tres años― entregó a Sandvik Coromant México el certificado PloggingMx, el cual es emitido por el Instituto Mexicano de Certificación y Normalización.

Este año se donarán 50% más de prótesis

Dos de los participantes más entusiastas de la carrera fueron Ángeles Lomelí y Diego Encinas, de 30 y 29 años respectivamente, beneficiarios de la Fundación Markoptic.

Al platicar sobre cómo cambió su vida con las prótesis de brazos, Ángeles Lomelí del estado de Jalisco ―quien cursa la carrera de Medicina― refiere que ha ganado más seguridad en sí misma, porque puede apoyarse mejor para hacer las historias clínicas de sus pacientes. “Un niño estaba muy seriecito y cuando me vio la prótesis se emocionó y me preguntó que si era como la de Iron Man y fue lindo porque le saqué un sonrisa”, relató la joven estudiante, quien nació sin un  brazo.

Asimismo, Diego Encinas nacido en Sonora ―quien labora en un centro de diagnósticos― comentó que ha logrado realizar con más facilidad su trabajo, sobre todo actividades de más precisión, como canalizar pacientes y colocar sondas. Él tuvo un accidente automovilístico, donde perdió su brazo izquierdo.

Junto a ellos escuchaba paciente Manuel Humberto Gallardo, iniciador de la Fundación Markoptic, quien tuvo la idea de crear esta organización al perder la vista por problemas de salud. “La base de la Fundación es un centro de innovación y desarrollo tecnológico, donde le damos empleo a ingenieros en mecatrónica, en mecánica, en electrónica y próximamente se van a incorporar en biomecánica y en biomédica, todos ellos son jóvenes de edades de entre 19, 20, 21 años”, explicó el activista sobre el grupo de trabajo que fabrica los dispositivos.

Sin embargo, el financiamiento para fabricar nuevas prótesis ―algunas de ellas hechas con tecnología de impresión en 3D― depende de los apoyos del sector privado; de ahí la necesidad de buscar más aliados. La forma de colaboración con Sandvik consiste en que por cada kilo de carburo de tungsteno que la empresa recupera a partir de herramientas ya usadas que somete a reciclaje, otorga una aportación económica a la Fundación Markoptic.

Firmamos convenio el año pasado y, gracias a eso, te voy a dar un dato: en noviembre de 2018 donamos 10 prótesis mecánicas ―dos de las cuales son las de Ángeles y Diego― y ahora vamos a donar 15 (…) Incrementamos 50% nuestra capacidad de donación, eso hace que invitemos a empresas a sumarse y que vean que su ayuda se traduce de inmediato en apoyo a las personas,

comentó Manuel Humberto Gallardo. Actualmente es más la demanda que la oferta de prótesis, “en los últimos tres meses tuvimos 184 solicitudes, lamentablemente no podemos ayudar a todos, apoyamos hasta donde podemos. Es por eso que hacemos alianzas para que más empresas se sigan sumando y apoyen esta labor”, informó Ximena López a cargo de la Coordinación Asistencial de Fundación Markoptic.

Recoger no basta, hay que reciclar

La idea de hacer una carrera para limpiar las calles “llegó a México en 2018; pero esto que hacemos de hacer ejercicio, recoger, separar basura y darle una disposición final en centros de acopio, solo nosotros lo hacemos”, comentó en breve charla Eliza Apátiga, cofundadora PloggingMx.

Los voluntarios de la carrera ―personas maduras, jóvenes y niños― comenzaron su jornada con ejercicios de calentamiento y activación general del cuerpo  y luego emprendieron la marcha. La mayor parte de la basura recolectada fueron botellas y latas de bebidas, así como envolturas de botanas, un detalle revelador del tipo de dieta de los mexicanos, reflexionó Eliza Apátiga.

En las instalaciones del Club de Industriales de Querétaro ―que fue el centro de operación de la jornada― se juntaron todos los costales de basura recolectada y se separaron los residuos por tipos de materiales, los cuales se enviaron a centros de reciclaje.

“La intención es que no se caiga del camión, que no regrese a la calle y que no vaya a mares ni bosques (…) por eso queremos sembrar una semilla sobre el reciclaje de basura”, comentó Apátiga, quien durante la entrevista con Vanguardia Industrial explicó a los niños cómo los insectos contribuyen a degradar la materia muerta y abonar la tierra para dar lugar a nueva vegetación.

Entrevistas Silvia Ortiz/Enviada

Ver video aquí:

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