¿Los CEO’s de automotriz no están 100% convencidos de transitar a eléctricos?

Jun 22, 2023 Kusumura Leveau Blogs 0

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Muchos altos directivos de la industria han expresado una disminución en su confianza en la adopción masiva de esta tecnología y es importante destacar que estas preocupaciones no recaen principalmente en los consumidores, sino en diversos factores que afectan la dinámica del mercado y generan confusión en la cadena de suministro.

NAGOYA, Japón (22/06/2023).- Hoy quiero hablarles de un tema que ha estado generando cierta controversia en el mundo de los ejecutivos del automóvil: la transición hacia los vehículos eléctricos. Parece que no todos están completamente convencidos de este cambio tan significativo en la forma en que nos desplazamos.

Preocupa  viabilidad económica

Las inquietudes en la industria automotriz en relación a la transición hacia los vehículos eléctricos son comprensibles, pero también merecen un análisis detallado. Si bien es cierto que ha habido un creciente impulso hacia los vehículos eléctricos, muchos altos directivos de la industria han expresado una disminución en su confianza en la adopción masiva de esta tecnología.

No obstante, es importante destacar que estas preocupaciones no recaen principalmente en los consumidores, sino en diversos factores que afectan la dinámica del mercado y generan confusión en la cadena de suministro. Uno de los principales desafíos es la crisis de la cadena de suministro que ha afectado a múltiples industrias en todo el mundo. Esta crisis ha generado interrupciones en la producción y distribución de componentes necesarios para la fabricación de vehículos eléctricos, lo que ha llevado a retrasos y a una menor disponibilidad de estos automóviles en el mercado.

Además, el incremento en los precios de materias primas, como el cobre y el litio, que son fundamentales para la fabricación de baterías de vehículos eléctricos, ha generado preocupaciones sobre la viabilidad económica de esta transición. La volatilidad en los precios de estos materiales puede afectar la rentabilidad de los fabricantes de automóviles y, en última instancia, influir en la confianza de los ejecutivos de la industria.

Otro factor que contribuye a las inquietudes en la industria es la incertidumbre en cuanto a la demanda del mercado. Aunque los vehículos eléctricos han ganado popularidad y aceptación entre los consumidores, existe una preocupación legítima sobre si la demanda será suficiente para justificar las inversiones masivas en infraestructura de carga y la adaptación de las líneas de producción hacia vehículos eléctricos. Los ejecutivos buscan equilibrar la demanda actual y futura con los costos asociados con la transición hacia los vehículos eléctricos.

Por último, hay una constante evolución en la regulación gubernamental y las políticas ambientales que afectan a la industria automotriz. Las metas y objetivos establecidos por los gobiernos, como el caso de la administración de Biden en Estados Unidos, pueden generar presión adicional para que los fabricantes de automóviles aceleren la producción y adopción de vehículos eléctricos. Esto puede crear desafíos adicionales para los ejecutivos de la industria al tener que cumplir con los requisitos regulatorios y, al mismo tiempo, asegurar la rentabilidad y sostenibilidad de sus empresas.

Las inquietudes en la industria automotriz en relación a la transición hacia los vehículos eléctricos son resultado de diversos factores que van más allá de las preferencias de los consumidores. La crisis de la cadena de suministro, la incertidumbre en la demanda del mercado y la evolución de las regulaciones gubernamentales son elementos que influyen en la confianza de los altos directivos de la industria. Sin embargo, es importante reconocer que estos desafíos también presentan oportunidades para la innovación y el crecimiento de la industria automotriz en un camino hacia una movilidad más sostenible.

Descienden expectativas

Según una encuesta realizada por KPMG en diciembre de 2022, que involucró a más de 900 ejecutivos de la industria automotriz, se reveló que estos ejecutivos creen que para el año 2030, solo el 35% de las ventas de automóviles nuevos en Estados Unidos serán vehículos eléctricos. ¡Un descenso significativo en comparación con las expectativas anteriores!

En una encuesta similar realizada en 2021, se esperaba que los vehículos eléctricos representaran el 62% de las ventas de automóviles nuevos en Estados Unidos para 2030. Por lo tanto, es evidente que ha habido un cambio importante en la percepción de los ejecutivos de la industria en tan sólo un año.

Múltiples factores en juego

¿Pero qué está causando esta disminución en la confianza de los ejecutivos hacia los vehículos eléctricos? Parece que hay múltiples factores en juego. Uno de ellos es la crisis de la cadena de suministro y los problemas de inflación que han estado afectando a Estados Unidos. Como bien sabemos, estos desafíos han impactado a diversas industrias, incluida la automotriz.

Además, la meta establecida por la administración de Biden, de que los vehículos eléctricos representen la mitad de las ventas de automóviles nuevos en Estados Unidos para 2030 ha generado cierta presión en la industria. Los principales grupos de la industria automotriz, que representan a casi todos los fabricantes de automóviles importantes, incluso solicitaron la semana pasada a la Casa Blanca que alivie las regulaciones sobre emisiones para evitar que China obtenga una ventaja competitiva en el mercado estadounidense.

Impulsar el cambio

En resumen, la industria automotriz se encuentra en un momento interesante y desafiante. Aunque los vehículos eléctricos han ganado popularidad en los últimos años y han capturado la atención de muchos consumidores, no todos los ejecutivos están convencidos de que la transición sea tan rápida como se pensaba. Las preocupaciones relacionadas con la dinámica del mercado y los desafíos  en la cadena de suministro han llevado a una disminución en la confianza en la adopción masiva de vehículos eléctricos.

Sin embargo, como consumidores, tenemos el poder de impulsar el cambio eligiendo opciones más sostenibles y apoyando a las empresas comprometidas con la movilidad eléctrica. A medida que avancemos hacia el futuro, es posible que veamos un panorama automotriz muy diferente al que conocemos hoy en día.

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