“Los primeros chips, dentro de año y medio, dos años”: INA

Oct 15, 2021 admin Automotriz, Más Industria 0

Su presidente ejecutivo, Óscar Albín, se refirió así a la producción de semiconductores en Norteamérica, proyecto que Estados Unidos ya está ejecutando y en el que “estamos trabajando con la Secretaría de Economía para que México se ‘suba”.

Óscar Albín Santos, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), abrió la segunda jornada de conferencias magistrales en TECMA 2021. (Foto: Vanguardia Industrial).
…en atracción de IED “tenemos una pista de aterrizaje llena de baches” y al respecto, “estamos trabajando con el gobierno federal”. (Foto: Vanguardia Industrial)
…hay una regla que se llama Roll-up y si yo tengo una transmisión con el 80%, el mínimo (de la regla de origen) es 75(%), ya para el conteo de mi automóvil es el valor de la transmisión completa (con lo que se hace originario de Norteamérica). Si vale mil dólares y tengo 800 dólares de manufactura en Estados Unidos, esta transmisión cuando entra al auto vale mil dólares, esos mil dólares son completos, ya norteamericanos, como que ya adquieres tu ‘acta de nacimiento’, aunque tu sangre y tu abuelo hubiera sido Japonés, naciste en México, naciste en Estados Unidos, tienes 80%, eres americano” ejemplificó Oscar Albín al hacer una analogía. (Foto: Nissan Mexicana)

Blanca Soria

CIUDAD DE MÉXICO (15/10/2021).- El presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), Óscar Albín Santos, quien abrió la segunda jornada de conferencias magistrales en la feria de Tecnología en Máquinas-herramienta (TECMA) 2021, con la ponencia “Retos y Oportunidades de la Industria Automotriz en México”, tocó el tema del desacuerdo en la interpretación de Estados Unidos acerca de las reglas de origen del sector automotriz, además de plantear las desventajas de la competitividad-país para atraer Inversión Extranjera Directa (IED) y exponer la afectación causada por la escasez de semiconductores, respecto de los cuales recordó a los pioneros de esa industria y aseguró que no será antes de año y medio o dos años cuando se produzcan en Norteamérica los primeros semiconductores, industria respecto de la que, dijo, “estamos trabajando con la Secretaría de Economía para que México se ‘suba”.

Competitividad-país: los baches

Al hablar sobre las condiciones que tiene México en cuanto a competitividad a nivel internacional para la atracción de Inversión Extranjera Directa (IED), el presidente ejecutivo de la INA aseveró: “Para ser sinceros, la Inversión Extranjera Directa en México está complicada, no tenemos una pista de aterrizaje bien planita, como la solíamos tener”.

La IED, planteó, sería la opción para regularizar la cadena de suministro que normalmente es un triángulo, pero que “en México, a diferencia de un triángulo, tenemos un perfecto rombo”, en el que “igual que cualquier país desarrollado” están en el nivel superior “todos los OEM’s, todos los Tier’s one’s, (…) pero a la hora de irnos a Tier two’s hay que importarlos” y “convertir el rombo en un triángulo es Inversión Extrajera Directa: ‘Robert Bosch, tráete a tu fabricante de fine estamping para las pastillas de freno porque no hay fine stamping en México’. Ok, se viene el fabricante de fine stamping de Robert Bosch. O bien, vinculación de proveedores: ‘Oye, pues por ahí está este amigo de Celaya que produce fine stamping, que le vende a Continental, ¿por qué no puede ser bueno también para Bosch? ¡Ah! ¡Mira!, ¡Pues no lo conocía!”.

Esa es una labor que la INA está desarrollando porque “tenemos que vincularnos” en donde estén los proveedores, “hay que hacer más vinculación y conocernos entre nosotros”, dijo antes de comentar que “hemos desarrollado una plataforma que conecta a grandes compradores con Tier one’s, con fabricantes de todo Norteamérica” y en la que “Canadá ya está subiendo sus fabricantes”.

Estos esfuerzos son una alternativa al hecho de que en atracción de IED “tenemos una pista de aterrizaje llena de baches” y al respecto, “estamos trabajando con el gobierno federal”.

Al expresar su desconocimiento sobre “qué tanto éxito vamos a tener”, aseguró que “no podemos dejar de seguir insistiendo, insistiendo e insistiendo, y hacer escuchar nuestra voz. Necesitamos acceso a energéticos en cantidad”.

Reprochó que

no hay electricidad en México, suficiente. Y todas las inversiones que estaban existiendo para generar energía están detenidas por la famosa ley energética y de electricidad, ¡vaya! ¡Estamos fregados!,

Para dar una idea de la desventaja que esto implica refirió que comparados con Estados Unidos en México “no solamente no hay. Vale 70% más. ¡Pues así, ¿cómo?!”.

Defender el T-MEC

Respecto al T-MEC destacó que “hay que seguir manteniendo y defendiendo nuestro tratado de libre comercio. Ahorita precisamente estamos en un tema de reglas de origen (…) ¿cuál es la bronca que traemos contra la interpretación que tiene Estados Unidos de esta regla? Lo que dice el tratado de libre comercio es que los automóviles tienen que tener la fabricación en Norteamérica, de todos estos componentes: del motor, de la transmisión, los ejes, el chasis, la carrocería, el sistema de suspensión, el sistema de dirección y la batería de litio. Todo esto tiene que ser producido con un contenido norteamericano del 75%”.

Explicó que “eso para algunas fábricas, sobre todo alemanas o japonesas estaba muy complicado porque hay muchos motores que son comunes para todo el mundo” y ejemplificó con un modelo de Audi: “Una Q5 hecha en Puebla, con un motor V6 turbo, que es de alto rendimiento y viene de Alemania, ya no puede calificar porque el motor no está hecho” en Norteamérica. Eso “llevaría a que el motor sea 0%” de contenido regional, pero si “todos los demás componentes califican con (un contenido regional) mayor del 75%, entonces se genera lo que llamamos el super core”.

Es decir, continuó, “si yo no tengo el motor (de fabricación norteamericana), pero el promedio de todas las demás (partes) me da la oportunidad de calificar el coche en su totalidad en este concepto (de 75% de contenido regional), pues lo califica. Entonces, hay una regla que se llama Roll-up y si yo tengo una transmisión con el 80%, el mínimo (de la regla de origen) es 75(%), ya para el conteo de mi automóvil es el valor de la transmisión completa (con lo que se hace originario de Norteamérica). Si vale mil dólares y tengo 800 dólares de manufactura en Estados Unidos, esta transmisión cuando entra al auto vale mil dólares, esos mil dólares son completos, ya norteamericanos, como que ya adquieres tu ‘acta de nacimiento’, aunque tu sangre y tu abuelo hubiera sido Japonés, naciste en México, naciste en Estados Unidos, tienes 80%, eres americano” ejemplificó al hacer una analogía.

El problema con la interpretación de Estados Unidos al respecto es que consideran que ese porcentaje de 80 “no lo puedes subir y nada más vale lo que vale, 80 no sube a 100, (…) entonces (respecto a) esta interpretación es la que traemos ahorita el problema y que probablemente se vaya a tener que ir a un panel de controversia” con “expertos de un lado y expertos del otro, independientes, que dan su interpretación y llegan a una conclusión. Si esa conclusión sigue siendo, digamos que, un amparo a Estados Unidos (…) nos tendremos que ir a un proceso mucho más largo, con la Organización Internacional de Comercio. Esperemos que no”.