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Abr 07, 2020 admin Automotriz, Más Industria 1
En vísperas de que este acuerdo comercial entre en vigor en Norteamérica, el gobierno de EU tiene detenido el listado de fracciones arancelarias de contenido regional con que debe cumplir la industria automotriz, entre las cuales está la cuota de 70% de acero y aluminio, acusa el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses Camiones y Tractocamiones (ANPACT) de México, Miguel Elizalde.
Por: Redacción/Vanguardia Industrial
CIUDAD DE MÉXICO (07/04/2020).- A escasos tres meses de que entre en vigor el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), previsto para julio próximo, el sector automotriz carece, en el tema de contenido regional, de un listado definitivo de las fracciones arancelarias –específicamente las del acero y el aluminio que tiene que ser de 70%—, con el que debe cumplir y en el que el gobierno de Estados Unidos podría hacer agregados, de última hora, de fracciones arancelarias que no se han discutido en más de un año y que se tendrían que llevar a cabo de inmediato, por lo que la industria automotriz regional está solicitando que la entrada en vigor de este tratado comercial se postergue para el 1 de enero de 2021, por lo menos para esta rama industrial, afirmó el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses Camiones y Tractocamiones (ANPACT) de México, Miguel Elizalde.
Entrevistado en el programa de radio de Vanguardia Industrial, conducido por Silvia Ortiz y Rosalba Amezcua, el dirigente informó que “hemos solicitado específicamente que la reglamentación y su informe del sector automotriz entre (en vigor) el 1º de enero de 2021. Si se decide que entre el T-MEC en el segundo semestre de este año, lo que sí especificamos, es que la parte automotriz, es decir los nuevos requisitos de la industria automotriz, que sí entraran el 1º de enero de 2021 para tener oportunidad de cumplir estos nuevos requisitos”, pues de lo contrario la industria de la región se vería afectada de inmediato, ya que al no cumplir con lo estipulado en la reglamentación, se nos trataría, dijo “como si no formáramos parte del nuevo tratado. Es decir, tendríamos que pagar el arancel correspondiente”.
Este arancel, explicó, “varía dependiendo del tipo del vehículo: si es camión, tractocamión o autobús, desde un 4% hasta un 25%. Y aquí, digo, con un 4% nos saca de competencia con otros países. Ahora, ¡imagínate con un 25%! Por eso la urgencia de extender la reglamentación de esos informes y que entre (en vigor) el 1º de enero de 2021”.
Tras destacar que la industria automotriz de los tres países –México, Estados Unidos y Canadá— está pidiendo a sus respectivos gobiernos este retraso en la entrada en vigor del T-MEC, porque
la afectación no nada más es para la industria mexicana, es para la industria automotriz de los tres países”, Elizalde afirmó que la preocupación de la iniciativa privada de las tres naciones es que “si afectas tú la región, obviamente entran en competencia otras regiones del mundo. Tal vez regiones de Asia o de Europa, porque en ese tiempo en el que se tengan que cumplir esos requisitos, pues van a ser más competitivos los vehículos, tal vez de otras regiones, de otros países del mundo.
El dirigente de la ANPACT especificó que los estándares de calidad con los que tiene que cumplir la industria automotriz expresados en certificaciones, no son requisitos que se puedan completar de manera simple ni rápida: “nuestra industria tiene que cumplir estos requisitos a través de certificados, y los certificados usualmente son anuales, es decir, toda la proveeduría ya tiene un certificado que le es válido todo el 2020. Certificar a mitad de año, tan sólo un ejemplo, un motor, tienes que contactar a más de 700 proveedores. Toma varios meses cumplir estos requisitos a mitad de año. Es por eso que se solicita específicamente, al gobierno de los Estados Unidos, que (la entrada en vigor del T-MEC para la industria automotriz) sea a partir del 1º de enero del 2021”.
Tras considerar la posibilidad de que “se sigan respetando los certificados que tenemos”, Elizalde explicó que “los nuevos requisitos (que establece el T-MEC ) son principalmente en el tema de valor de contenido regional, es decir, los componentes que deben de ser de la región del vehículo, el porcentaje. Deben ser, el valor de contenido laboral, es decir en las partes del vehículo, o el contenido del vehículo que tiene que ser de un país de altos salarios, de más de 16 dólares la hora, y muy importante, el contenido del 70% de acero y aluminio de la región. Todos estos tres factores que les comento, son nuevos y aunque sabemos que en el texto del tratado, sabemos qué se tiene que cumplir, el detalle está en cómo lo debemos de cumplir”.
Y ejemplificó: “nosotros como industria automotriz de pesados, tenemos 7 años para crecer de 60% de contenido regional, al 70%. El primer salto en el valor completo del vehículo es al cuarto año de implementación, es decir, eso, o sea, es importante y se debe de cumplir, pero ahí no está la urgencia”.
Expresó que la verdadera preocupación se debe a que pueden ser sorprendidos por el gobierno de Estados Unidos, que aún no ha expedido el listado de fracciones arancelarias –específicamente las correspondientes al acero y al aluminio—, al cual puede hacer adiciones de última hora –que no se han discutido en más de un año— y que se tendrían que cumplir de inmediato.
Y detalló: “en la parte del valor de contenido regional hay 15 partes o subpartidas arancelarias, que entran de inmediato, tiene que crecer, 4%, de inmediato, el día que entre en vigor. A esas partes se le tienen que conseguir unos certificados para poder cumplir estos nuevos requisitos. Agrégale nuevas variables, como son cumplir el acero y el aluminio. Hemos estado trabajando –el gobierno de México, el gobierno de Estados Unidos, la industria de México, la industria de Estados Unidos— un listado de fracciones arancelarias, por las cuales se tiene que cumplir lo que debe de adquirir el fabricante en cuestión de acero y en aluminio. No tenemos el listado definitivo todavía”.
Por esta situación, Miguel Elizalde consideró inviable la entrada en vigor del acuerdo comercial para el 1 de junio próximo, fecha prevista para tal efecto. “No puede ser (que en el) T-MEC, (en) la entrada en implementación, no sepamos, con un listado definitivo, qué se debe de cumplir. Lo que no queremos ver es una sorpresa, específicamente del gobierno de Estados Unidos, que agregue fracciones arancelarias, las cuales no las hemos discutido en más de un año, y se tengan que cumplir de inmediato. Ese es el riesgo que tenemos, por eso es necesario publicar la reglamentación de su informe a la brevedad y ya que esté publicada, pues al menos seis meses, calculamos el 1º de enero de 2021, para que se cumpla toda la cadena de la industria automotriz. De lo contrario, esto se complica”.
Enfatizó que la industria a la que pertenece
seguimos trabajando con la Secretaría de Economía en definir las fracciones arancelarias, es decir qué partes se deben de cumplir con el acero y el aluminio. Hemos tenido mucho contacto, más de un año de trabajo con la subsecretaria Luz María de la Mora, con la secretaria Graciela Márquez. Hemos tenidos un excelente contacto, una muy buena relación de trabajo, sin embargo sabemos que está atorado por Estados Unidos. Estados Unidos es el que lo tiene detenido. Sabemos que tiene que seguir presionando la Secretaría de Economía (para) definir a la brevedad esto.
Tras remarcar que en el control del tema del listado de las fracciones arancelarias “mucha de la presión viene del gobierno de Estados Unidos”, el representante de los productores de vehículos pesados en México, consideró que “es ahí en donde se debe de incidir e influir en que se permita cumplir estos nuevos requisitos a partir del 1º de enero del 2021 (porque) es la parte que nos puede complicar”.
El presidente del ANPACT identificó dos aspectos en la entrada en vigor del T-MEC: uno político, que son las autoridades pues “entendemos las declaraciones del presidente de México (Andrés Manuel López Obrador) de que se quiere que entre el T-MEC lo antes posible” y otro técnico –“la parte técnica de la industria, que somos los que tenemos que cumplir estos nuevos requisitos técnicos”.
Con esta referencia, consideró: “si por la parte política es bueno que entre el T-MEC a la brevedad, bueno, que se haga la parte de excepción en la industria automotriz y que sea con una solución técnica que podamos entrar (con la nueva reglamentación) el 1º de enero de 2021”.
Elizalde, además, mencionó otro factor determinante en el escenario económico mundial: la pandemia del coronavirus o Covid-19. Y reiteró: “ahorita nuestra cadena de proveeduría, tanto en México, Estados Unidos y Canadá está atendiendo varios aspectos de esta emergencia y esa es otra variable más que abonaría a que se implemente el T-MEC a partir del 1º de enero de 2021”.
Escuchar Entrevista Aquí:
En vísperas de que este acuerdo comercial entre en vigor en Norteamérica, el gobierno de EU tiene detenido el listado de fracciones arancelarias de contenido regional con que debe cumplir la industria automotriz, entre las cuales está la cuota de 70% de acero y aluminio, acusa el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses Camiones y Tractocamiones (ANPACT) de México, Miguel Elizalde.
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La Industria Aeroespacial sigue despegando en estados como Guanajuato, nuestra especialista Silvia Ortiz de Vanguardia Industrial, nos explica la detonación de este sector en #NoticiasW con #VeroMéndez pic.twitter.com/itZ8boXKcU
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One thought on “Prevé ANPACT madruguete de EU a la industria automotriz con el T-MEC”