Financiamiento, una prioridad para el nuevo jefe de SHCP

Jul 11, 2019 admin Economía, Más Industria 0

La banca de desarrollo dispone de hasta 800,000 millones de pesos (mdp) para el financiamiento de nuevos proyectos productivos en México, así lo confirma un documento interno de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), elaborado por el propio Arturo Herrrera Gutiérrez titular de esta dependencia.

El nuevo titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP), Arturo Herrera Gutiérrez, tendrá entre sus prioridades dar seguimiento a la estrategia de fortalecer al sector financiero del país y de incluir a más usuarios ―entre ellos empresas pequeñas y medianas― que todavía no son sujetos de crédito de las instituciones formales como los bancos y las aseguradoras. (Foto: Milenio)

Por: Guadalupe Cadena

CIUDAD DE MÉXICO (11/07/2019).- El nuevo titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP), Arturo Herrera Gutiérrez, tendrá entre sus prioridades dar seguimiento a la estrategia de fortalecer al sector financiero del país y de incluir a más usuarios ―entre ellos empresas pequeñas y medianas― que todavía no son sujetos de crédito de las instituciones formales como los bancos y las aseguradoras.

El documento “10 Foro de emisoras: las medidas hacendarias para el impulso económico” ―que fue liberado el mes pasado cuando Arturo Herrera todavía era subsecretario de Hacienda― reconoce que en el país persiste una situación de baja penetración financiera, por lo que el gobierno de la República comenzó a formular políticas de apoyo a las empresas y a los consumidores.

En este sentido, la SHCP informa en el documento que la banca de desarrollo está en proceso de transformación y que por lo pronto, las instituciones de fomento ―como Banobras, Bancomext y Nafin ― disponen de hasta 800,000 millones de pesos (mdp) para el financiamiento de nuevos proyectos productivos en México, con plazos de hasta 20 años y tasas de interés fijas o variables, con la opción de movilizar financiamiento privado adicional.

En su argumentación, las autoridades hacendarias exponen que 68% de los adultos en México tiene algún producto financiero, todavía lejos de una cobertura universal, pero que además una segmentación por regiones muestra que la zona centro sur y sureste del país arroja una proporción de 60%, según datos oficiales al cierre de 2018.

Por otro lado, el número de empresas listadas en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se ubica en 145 en la actualidad, cifra similar a la de hace casi 15 años, lo que habla de un lento desarrollo de este mercado para financiar a más empresas.

Además, como un efecto del escaso financiamiento, la inversión en infraestructura se ha estancado, ya que entre los años 2000 y 2018, el gasto promedio ha sido de 21.5% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que ha resultado insuficiente para echar a andar diversos proyectos de obra pública que requiere el país como aeropuertos, presas, infraestructura energética y de comunicaciones.

Medidas en marcha

En este sentido, el documento de la SHCP destaca que el sector público debe recuperar su rol como impulsor de la infraestructura, pero reconoce que ante la magnitud de los costos de los proyectos el “mecanismo de financiamiento debe discutirse con la iniciativa privada”.

Al cierre de 2018, la composición del gasto en inversión física de México era de 19.2% del sector privado y de 2.9% del gobierno, como proporción del PIB, respectivamente.

La SHCP refiere en su documento que, en aras de “abrir las llaves del financiamiento” a más usuarios, la presente administración también ha comenzado a promover plataformas digitales para “bancarizar” a la población que vive en zonas remotas, además de que las autoridades preparan medidas para el uso de medios de pago electrónicos con la intención de evitar el uso de efectivo.

Otra aportación consiste en dar incentivos al ahorro de largo plazo, a través de la reciente reforma a la Ley de las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afore), que flexibiliza su régimen de inversión en aras de que puedan recurrir a nuevos instrumentos.

A partir de este año entró en vigor una nueva estructura fiscal para Ofertas Públicas Iniciales (OPI) y los tenedores de bonos corporativos, la cual exenta del Impuesto Sobre la Renta (ISR) a los residentes en el extranjero por los intereses pagados, que deriven de bonos emitidos por sociedades radicadas en México, entre otros beneficios.

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